La pinza

la pinza que se nos fue

Rodríguez Iburro dijo que la refinería se haría y se haría. ¿Para qué íbamos a examinar las posibilidades de éxito, las opciones de despilfarro, la situación real del tío del sobrinísimo (EREs, prisión, vertidos incontrolados, favoritismos aún más descontrolados)...?

Ahora el buenamigo Varita sigue en sus trece, o sea, en las trece de Rodríguez Iburro, o sea, mantenerse en el poder a base del palo y la zanahoria, como siempre.

Un palo que siempre castiga a los extremeños.

Una zanahoria que, de tanto tiempo colgada en el palo, ya está totalmente podrida.

Allá en tiempos, cuando la izquierda extremeña concordaba en sus análisis con la derecha (o viceversa) allí estaba el amigo Rodríguez Iburro para rebuznar todo lo alto que podía y recordar "La pinza" que, según él, unía a PP y a IU, en contubernio contra su trono. Este pobre Rguez. Iburro, como buen Equus Asinus, no razonaba lo suficiente como para comprender que no se trataba de una alianza contra su nombre, sino de valores de democracia, cuando la democracia nos importaba.

Puede que no entendiera, como hoy su amiguete Varita, que lo único que estaba escuchando era la expresión máxima de la libertad, a la que todos, absolutamente todos, tenemos derecho: negros, blancos, de izquierda, de derecha, de villarriba o de villabajo.

Pero cómo les jode, a Iburro y a la Varita de Iburro, la expresión de la libertad... Y la libertad de expresión, no digamos...

Total, que si tanto le molestaba la pinza al viejo y tanto más le chincha al amigo, quizá sea porque nunca se hayan planteado que esa concordancia entre ideologías de toda pasta, efectivamente, es "la pinza" que a nuestros presidentes un día se les fue y que nunca quisieron recuperar.